Lo mejor para desengancharse de la droga del amor es no volver a probarla. Para separarse de tu pareja lo mejor es la desconexión total en la vida real y la vida virtual. Cero contacto.
Mi nuevo post en la revista Mente Sana.
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29 de noviembre de 2019
28 de noviembre de 2019
Cuidemos a nuestros niños y niñas
Solo podremos cambiar este mundo en el que vivimos si cuidamos a la infancia. Son una responsabilidad de todos y todas: necesitan protección, amor, cuidados, necesitan sentir que le importan a alguien, sentir confianza en sí mismas, que alguien crea en ellos, ellas. Pero sobre todo necesitan afecto y abrazos.
No podemos dejarles en la calle, no podemos criminalizarles, ni condenarles a la pobreza y a la exclusión social. No les llaméis Menas, son niños y niñas desamparadas, víctimas de un sistema cruel, violento e injusto que les cierra todas las puertas. No les llaméis delincuentes, el problema somos nosotros y nosotras, la sociedad entera.
Los educadores y educadoras de los centros de menores y pisos tutelados están haciendo una labor impresionante y deberíamos cuidarlos también, porque les están dando no sólo educación, sino también afecto, y les están ayudando con herramientas para que puedan insertarse en la sociedad y para que confíen en ellos mismos y salgan adelante
#CuidemosALaInfancia #CuidemosALosYLasCuidadoras #NOsonMenasSonNiñasYNiños
No podemos dejarles en la calle, no podemos criminalizarles, ni condenarles a la pobreza y a la exclusión social. No les llaméis Menas, son niños y niñas desamparadas, víctimas de un sistema cruel, violento e injusto que les cierra todas las puertas. No les llaméis delincuentes, el problema somos nosotros y nosotras, la sociedad entera.
Los educadores y educadoras de los centros de menores y pisos tutelados están haciendo una labor impresionante y deberíamos cuidarlos también, porque les están dando no sólo educación, sino también afecto, y les están ayudando con herramientas para que puedan insertarse en la sociedad y para que confíen en ellos mismos y salgan adelante
#CuidemosALaInfancia #CuidemosALosYLasCuidadoras #NOsonMenasSonNiñasYNiños
25 de noviembre de 2019
Entrevista sobre masculinidades: héroes infantiles
Me entrevistó María Sánchez para El Debate, un periódico de Sinaloa, México, y hablamos de cómo enseñamos a los niños a ser violentos a través de los juegos bélicos y los héroes que les ofrecemos: narcos, mafiosos, sicarios, hombres con poder. Los hombres que producen y crean películas mitifican e idealizan al hombre violento, y desde ahí, los niños construyen sus masculinidades, adorando a asesinos que resuelven conflictos o consiguen lo que desean utilizando la violencia.
Entrevista en el Debate sobre masculinidades
Entrevista en el Debate sobre masculinidades
Terror machista en México #25N
Luchando a muerte contra la muerte: no tenemos ni idea de lo que es vivir en el país con más femicidios en el mundo. Las niñas y las mujeres mexicanas viven con miedo y luchan cada día, van a estudiar y trabajar sin saber si van a volver o no.
Las acosan en el transporte público, en la calle, en el trabajo, en la universidad, en el supermercado, en el colegio, en cualquier lado. Salen de fiesta con miedo, pero salen, las que pueden. Y no saben si van a volver o no.
Las niñas salen de la escuela agarradas unas a otras para que no se las lleven, el abuso sexual en el hogar empieza en la más tierna infancia, el acoso sexual en las calles es constante, la violencia emocional y física en la pareja es común, y cuando se quieren separar, las matan.
Díez al día son asesinadas, una es violada cada 40 minutos, son unas cifras terroríficas, y el odio es atroz: las trocean y las dejan en una maleta a la puerta del trabajo, las empalan, las torturan y violan, las desaparecen y las secuestran, las venden a redes de trata, la policía colabora con las redes, y también, los mismos policías, las violan en grupo. Los jueces las encarcelan si abortan, mueren miles al año abortando.
Es insoportable el nivel de machismo y violencia contra ellas, y su lucha es admirable: hay cientos de colectivas trabajando local y globalmente, tienen redes de apoyo a las mujeres en todo el país, y han tejido una telaraña feminista maravillosa que lucha a muerte contra la muerte.
Las mujeres mexicanas son valientes solidarias y luchadoras, un ejemplo a seguir para todas nosotras. Sin embargo, para la opinión pública es más indignante verlas protestar que verlas muertas. Les enfada más el feminismo que el femicidio diario. Ayer salieron miles a la calle a protestar de nuevo, y todas las feministas del mundo están solidarizandose con ellas.
Desde Costa Rica os mandamos un fuerte abrazo a todas #TenéisDerechoAEstarCabreadas #ElMachismoMata #StopViolaciones #StopFemicidios #StopTerrorismoMachista #VivasNosQueremos
24 de noviembre de 2019
También hay maltrato sin golpes
Para aprender a identificar la violencia machista es importante entender que también hay maltrato sin golpes ni violencia física. Si tu pareja te dice constantemente que no te quiere, si habla mal de ti a los demás, si te obliga a asumir toda la carga doméstica y de cuidados, si se ríe de ti o te ridiculiza, si pretende que le obedezcas, si te hace sentir fea, si intenta aislarte de tu gente querida, si te humilla, si te vigila, si se niega a usar condón, si te presiona para tener relaciones sexuales cuando no te apetece, si controla tu dinero, si no respeta tu privacidad, si te obliga a pagar sus deudas, si te obliga a pedirle permiso cuando quieres hacer cualquier cosa, si controla tu vestuario, si te es infiel y te miente constantemente, si te contagia con enfermedades de transmisión sexual, si pretende que te quedes embarazada cuando tú no deseas ser madre, si se cree que eres su sirvienta, si te chantajea emocionalmente, si no confía en ti y te vigila y te cela, es violencia machista.
20 de noviembre de 2019
Enfermedades de transmisión social
Ojalá existiese una escuela o un espacio terapéutico en la que pudiésemos ir a curarnos cada vez que detectemos odio en nuestros corazones, o cada vez que alguien nos señale amablemente los primeros síntomas de estar sufriendo una enfermedad de transmisión social.
Ese odio que siente tanta gente contra los niños y niñas, las mujeres, la gente pobre, las personas con discapacidad, las personas que migran, las que luchan por los derechos humanos, las que tienen otro color de piel, las adultas mayores, las que profesan otra religión que no es la tuya, las personas diversas y las que aman a personas de su mismo sexo, todos estos odios se pueden curar con amor, empatía, solidaridad: necesitamos educación, formación y sensibilización para poder desarrollar estos antídotos naturales contra las fobias.
Hay que curarse, porque el odio mata y hace sufrir a millones de personas en el mundo cada día.
#EnfermedadesDeTransmisiónSocial #StopFobias #ParemosElOdio #Solidaridad #AmorDelBueno
Ese odio que siente tanta gente contra los niños y niñas, las mujeres, la gente pobre, las personas con discapacidad, las personas que migran, las que luchan por los derechos humanos, las que tienen otro color de piel, las adultas mayores, las que profesan otra religión que no es la tuya, las personas diversas y las que aman a personas de su mismo sexo, todos estos odios se pueden curar con amor, empatía, solidaridad: necesitamos educación, formación y sensibilización para poder desarrollar estos antídotos naturales contra las fobias.
Hay que curarse, porque el odio mata y hace sufrir a millones de personas en el mundo cada día.
#EnfermedadesDeTransmisiónSocial #StopFobias #ParemosElOdio #Solidaridad #AmorDelBueno
16 de noviembre de 2019
¿Son más violentos los hombres españoles?
Los hombres españoles no son más violentos que los hombres alemanes, marroquíes o argentinos. Lo que sucede es que en España hay una de las mejores leyes contra la violencia machista y que contamos una a una a las mujeres asesinadas, salimos a la calle a protestar, y pedimos a gritos que dejen de matarnos.
Pocos periodistas se atreven ya en España a presentar los femicidios como crímenes pasionales, aunque siguen hablando de mujeres que aparecen muertas, pero en general hay más conciencia en la profesión y más formación en temas de género. En Alemania hay más víctimas de violencia machista que en España, pero los asesinatos se siguen presentando en la sección de sucesos, y en otros países los femicidios ni siquiera son noticia.
Afortunadamente en España salimos en masa a las calles a denunciar las violaciones de manadas y los asesinatos, y el apoyo de la sociedad al movimiento feminista es más grande que nunca. Sigamos trabajando contra los femicidios, las violaciones y el maltrato, vamos a fortalecer las redes internacionales feministas para sensibilizar y concienciar a la gente, para pedir el apoyo de los y las periodistas, y para seguir luchando por el derecho de todas las mujeres a una vida libre de violencia. #25N #NiUnaMenos #StopViolenciaMachista
Pocos periodistas se atreven ya en España a presentar los femicidios como crímenes pasionales, aunque siguen hablando de mujeres que aparecen muertas, pero en general hay más conciencia en la profesión y más formación en temas de género. En Alemania hay más víctimas de violencia machista que en España, pero los asesinatos se siguen presentando en la sección de sucesos, y en otros países los femicidios ni siquiera son noticia.
Afortunadamente en España salimos en masa a las calles a denunciar las violaciones de manadas y los asesinatos, y el apoyo de la sociedad al movimiento feminista es más grande que nunca. Sigamos trabajando contra los femicidios, las violaciones y el maltrato, vamos a fortalecer las redes internacionales feministas para sensibilizar y concienciar a la gente, para pedir el apoyo de los y las periodistas, y para seguir luchando por el derecho de todas las mujeres a una vida libre de violencia. #25N #NiUnaMenos #StopViolenciaMachista
15 de noviembre de 2019
Agradecida
Cuando era pequeña admiraba mucho a la gente del circo y alguna vez soñé con la idea de vivir viajando. No me imaginé que de mayor me haría estas giras visitando pueblos y ciudades con el coche, el compañero y el crío, las maletas, el carrito, y los bártulos, echando kilómetros del sur al norte, el este y el oeste, la meseta, las montañas, las islas, los valles y las playas de mi país, me siento muy afortunada.
Me encanta conocer gente nueva, aprender del trabajo de las compañeras feministas, asomarme a su realidad y asombrarme con sus pequeñas y grandes luchas, ver cómo se organizan y se apoyan, y contribuir con mi granito de arena al tejido de esta red global de mujeres que luchan por la libertad, la igualdad, la justicia y los derechos humanos. Es un trabajo hermoso, aunque cansado, que también me lleva a visitar países de América Latina que nunca habría podido conocer.
A todos lados voy con ganas de dejar a la gente con subidón, con la idea de que sí se puede trabajar el patriarcado, sí se puede disfrutar del amor y liberarlo del machismo y la violencia, que las mujeres no estamos condenadas a sufrir y sacrificarnos, y que tenemos derecho al placer y a ser felices. Me siento una sembradora de semillas, y me marcho de los sitios deseando haber sido útil con las preguntas que voy planteando allá donde paso.
En cada viaje regreso con la maleta llena de cariño, aprendizajes, nuevas preguntas e ideas nuevas, así que siento que doy y recibo a manos llenas. A veces me alojo en hoteles y a veces en casas de amigas, amigos y familia, donde una se siente como en casa. Gracias a toda la gente que viene a verme a las charlas, es muy impresionante veros allí aunque llueva a mares o haga frío, sabiendo además que muchas venís desde otros pueblos o ciudades. Gracias a las instituciones, colectivas y organizaciones que me invitan, y gracias a mi gente que me acoge y me permite insertarme en su vida durante algunos días. Y gracias a la vida que tanto me está dando.
Me encanta conocer gente nueva, aprender del trabajo de las compañeras feministas, asomarme a su realidad y asombrarme con sus pequeñas y grandes luchas, ver cómo se organizan y se apoyan, y contribuir con mi granito de arena al tejido de esta red global de mujeres que luchan por la libertad, la igualdad, la justicia y los derechos humanos. Es un trabajo hermoso, aunque cansado, que también me lleva a visitar países de América Latina que nunca habría podido conocer.
A todos lados voy con ganas de dejar a la gente con subidón, con la idea de que sí se puede trabajar el patriarcado, sí se puede disfrutar del amor y liberarlo del machismo y la violencia, que las mujeres no estamos condenadas a sufrir y sacrificarnos, y que tenemos derecho al placer y a ser felices. Me siento una sembradora de semillas, y me marcho de los sitios deseando haber sido útil con las preguntas que voy planteando allá donde paso.
En cada viaje regreso con la maleta llena de cariño, aprendizajes, nuevas preguntas e ideas nuevas, así que siento que doy y recibo a manos llenas. A veces me alojo en hoteles y a veces en casas de amigas, amigos y familia, donde una se siente como en casa. Gracias a toda la gente que viene a verme a las charlas, es muy impresionante veros allí aunque llueva a mares o haga frío, sabiendo además que muchas venís desde otros pueblos o ciudades. Gracias a las instituciones, colectivas y organizaciones que me invitan, y gracias a mi gente que me acoge y me permite insertarme en su vida durante algunos días. Y gracias a la vida que tanto me está dando.
12 de noviembre de 2019
¿Dónde está nuestro derecho al divorcio?
La gran mayoría de hombres que asesinan mujeres lo hacen porque ellas no quieren continuar la relación, y se quieren separar. Creen que ellos son los dueños y deben ser obedecidos, y cuando no se sienten obedecidos, castigan con la muerte a sus mujeres como si fuesen dictadores.
Creen que pueden maltratar y matar a sus compañeras, hijos e hijas, y animales porque son suyos. Creen que tienen derecho a matar a la compañera si ella ya no quiere seguir a su lado porque no las consideran seres libres, sino seres nacidos para servirles, adorarles y obedecerles.
Dicen que aman a su compañera, pero en realidad la odian, a ella y a todas las mujeres. La gente que apoya a los asesinos y niega la violencia machista piensa igual, todos ellos creen que las mujeres son propiedad de los hombres y que las desobedientes han de ser castigadas. Son gente que no cree en el derecho de las mujeres a elegir libremente a su pareja, a separarse y divorciarse, ni a elegir su maternidad. Son millones de personas las que piensan así.
Por eso es tan importante derribar el patriarcado y el machismo: todas las mujeres nacemos libres, somos seres libres, y tenemos los mismos derechos que los hombres. Podemos juntarnos y separarnos cuando queramos
#DerechoAlDivorcio #StopViolenciaMachista #25N #NiUnaMenos #VivasNosQueremos
Creen que pueden maltratar y matar a sus compañeras, hijos e hijas, y animales porque son suyos. Creen que tienen derecho a matar a la compañera si ella ya no quiere seguir a su lado porque no las consideran seres libres, sino seres nacidos para servirles, adorarles y obedecerles.
Dicen que aman a su compañera, pero en realidad la odian, a ella y a todas las mujeres. La gente que apoya a los asesinos y niega la violencia machista piensa igual, todos ellos creen que las mujeres son propiedad de los hombres y que las desobedientes han de ser castigadas. Son gente que no cree en el derecho de las mujeres a elegir libremente a su pareja, a separarse y divorciarse, ni a elegir su maternidad. Son millones de personas las que piensan así.
Por eso es tan importante derribar el patriarcado y el machismo: todas las mujeres nacemos libres, somos seres libres, y tenemos los mismos derechos que los hombres. Podemos juntarnos y separarnos cuando queramos
#DerechoAlDivorcio #StopViolenciaMachista #25N #NiUnaMenos #VivasNosQueremos
5 de noviembre de 2019
#1 Trampas del romanticismo patriarcal
Cuando él hace como que se compromete pero sigue de fiesta: una de las trampas que nos pone el romanticismo patriarcal es hacernos creer que tu novio se va a convertir en un buen compañero de vida y en un papá comprometido. La sorpresa viene cuando él sigue de fiesta sin ti, huye agobiado y tú te quedas en casa sola, criando sola, asumiendo toda la carga doméstica y de cuidados, cabreada y frustrada porque en el noviazgo te trató como a una compañera, montasteis el nidito de amor, luego te pidió hijos, y después decidió seguir su vida como si nada.
Ante esta situación tenemos tres opciones: o buscar una mamá sustituta para poder seguir la fiesta con él, o separarte de él, o seguir con él, eternamente cabreada porque él es un ser libre con criada a su servicio, y tú te ves atada a la enorme responsabilidad de tener una familia, con doble jornada laboral y sin apenas tiempo libre.
Para muchas mujeres el matrimonio y la maternidad son una cárcel, pero nos lo venden como una utopía igualitaria, aunque son muchos los hombres que jamás forman equipo ni tratan a las mujeres como compañeras. Trampas del patriarcado moderno que nos hace creer que el amor es compartir una vida en común con un hombre que nos tratará como a iguales.
No hay más que echar un vistazo a las estadísticas de uso del tiempo libre en las que se ve la enorme diferencia que existe entre hombres y mujeres. #TrampasDelAmorRomántico
4 de noviembre de 2019
Las luces de los pueblos, y las mujeres de rodillas
Esta noche atravesamos la mitad de la península viajando por la carretera, acompañados por la luz de la luna llena. Me fui fijando en las luces de los pueblos a lo lejos. Todos los pueblos pequeños, por pequeños que sean, tienen la luz de la torre de la iglesia.
Los medianos, la luz del puticlub y la luz de la iglesia.
Los grandes, la luz del campo de fútbol, la luz del puticlub y la de la iglesia.
Estoy impresionada con la cantidad de centros de mujeres esclavizadas que hay en mi país, a la vista de todo el mundo, disponibles 24 horas, siempre con chicas nuevas para que los maridos no se aburran. No son ilegales, los hombres comercian con mujeres y con niñas en cada rincón de España. Las luces me recuerdan que para las mujeres "buenas" están las iglesias y los suelos de las casas, y para las "malas", el burdel. Nos quieren a todas de rodillas frente al Señor.
Los medianos, la luz del puticlub y la luz de la iglesia.
Los grandes, la luz del campo de fútbol, la luz del puticlub y la de la iglesia.
Estoy impresionada con la cantidad de centros de mujeres esclavizadas que hay en mi país, a la vista de todo el mundo, disponibles 24 horas, siempre con chicas nuevas para que los maridos no se aburran. No son ilegales, los hombres comercian con mujeres y con niñas en cada rincón de España. Las luces me recuerdan que para las mujeres "buenas" están las iglesias y los suelos de las casas, y para las "malas", el burdel. Nos quieren a todas de rodillas frente al Señor.