Páginas

1 de diciembre de 2013

Entrevista a Coral Herrera en La Red 21



Entrevista en La Red 21 (Uruguay)
Periodista: Georgina Mayo
Entrevistada: Coral Herrera Gómez. Autora queer y doctora en Comunicación Audiovisual. 
1-  ¿De qué va tu nuevo libro, Bodas Diversas y Amores Queer?  Háblanos de cómo se te ocurrió hacerlo.
Es un libro a medio camino entre el ensayo y el relato en el que cuento  mis bodas en Madrid, Tánger y San José, y otras bodas diversas. En primer lugar es una defensa del derecho a amar de todos los seres humanos, y un análisis de los ritos nupciales y las utopías románticas posmodernas.
Los lectores y lectoras encontrarán pocas soluciones y muchas preguntas para desmitificar las bodas y reírnos un rato de nosotros mismos. Es una mezcla de reflexiones,  anécdotas personales, historias de vida, cuentos sobre bodas románticas y divertidas. He querido hacer mi aporte a la visibilización de la diversidad de nuestra realidad amorosa, y contribuir a la creación de nuevos relatos sobre amores románticos desde una perspectiva más diversa. Además es una forma de reivindicar y homenajear  la lucha por el matrimonio igualitario y los derechos humanos de la población LGBTQ.
Es un proyecto personal porque esta vez no lo envié a ninguna editorial y quise sacarlo en una plataforma digital. Llevo muchos años ofreciendo contenidos en mi blog y pensé que era el momento de lanzarme yo sola en un proyecto empresarial auto gestionado. Ha sido un proceso duro, pero muy enriquecedor, porque he aprendido mucho sobre auto-edición y auto-publicación, marketing on line, diseño y maquetación…. y he tenido un control total sobre mi obra.
2-  ¿Qué es el amor Queer?  En Uruguay no es un concepto conocido, ¿puedes contarnos qué es el queer?
Queer es un término anglosajón que significa raro y se utilizaba para insultar a la gente que no encaja en los cánones de la normalidad. La comunidad LGBT se apropió del término para reivindicar la existencia de todos aquellos que permanecen invisibles para la sociedad. La identidad gay o lésbica perdió en gran parte su carácter marginal y con la consolidación de las democracias actuales, pasó a ser la etiqueta que engloba a un sector de la población de clase media-alta, entorno urbano y cosmopolita que se integra sin problemas a la sociedad y tiene sus derechos plena o parcialmente garantizados.
El queer surgió para dar voz a toda la gente que sufre no sólo discriminación por su orientación sexual, sino también discriminación por la clase socioeconómica, el color de su piel, la nacionalidad, la edad, el idioma, la religión. Así, el queer nació en las calles y llegó a las universidades: hoy es movimiento, teoría, acto político y artístico a la vez. Es una herramienta de análisis multidisciplinar que nace de las teorías de género y del postestructuralismo y su afán es continuar con el derribo del pensamiento binario y la estructura patriarcal, visibilizar todo aquello que permanece en las periferias, y promover relaciones horizontales en las que las diferencias sirvan para enriquecernos, no para discriminarnos.
En mis libros hablo de los amores queer como sinónimo de amores diversos, esos amores que no corresponden al modelo ideal de pareja heterosexual y monogámica. Más allá de la utopía romántica posmoderna, se multiplican las utopías amorosas alternativas de gente que se gusta y se quiere, se casa y se descasa. Son los amores interculturales, los amores intergeneracionales, los amores triádicos, los amores presidiarios, los amores adúlteros, los amores clandestinos.
3-  ¿Por qué empezaste a interesarte en los temas de género. ¿A partir de qué experiencia?
Mi madre era militante feminista y mi padre un hombre igualitario, así que ya desde pequeñita sentía mucha curiosidad por las diferencias entre mis padres y los de mis amigos y amigas del colegio.



En la carrera apenas entramos en la teoría de género, así que me puse a estudiarlo en el doctorado porque consideraba que era fundamental ofrecer una investigación sobre la cultura romántica occidental desde un enfoque de género. Y después de descubrir los feminismos, me enamoré de los estudios de masculinidad y finalmente me hice queer, porque me ofrece una herramienta de análisis mucho más multidisciplinar y porque creo que el factor diversidad es fundamental para estudiar las culturas humanas.
4-  ¿En qué se manifiestan los conceptos de la sociedad patriarcal?
Principalmente se manifiesta en el dolor de los rostros de las madres cuyas hijas son víctimas de la trata de esclavas sexuales, en los llantos de los bebés abandonados en China porque nacieron hembras, en el dolor de espalda de las mujeres que soportan la sobrecarga de trabajo remunerado y no remunerado al final de la noche. En la foto de grupo de alguna cumbre de políticos o grandes empresarios, donde apenas hay mujeres, o en la foto de los desplazados por las guerras, donde la mayoría son mujeres. En las nóminas de las empleadas domésticas, en las caras de terror de los niños cuyas madres son víctimas de la violencia por parte del marido, en los gritos de las niñas que sufren la ablación del clítoris a diario en muchos países del mundo.
5-   Y en la práctica, ¿cómo contribuimos las mujeres a que los criterios patriarcales continúen reproduciéndose?.
Las mujeres somos  las principales transmisoras del patriarcado. En casi todo el mundo los niños y las niñas son criados y educados por mujeres solas o grupos de mujeres. Las madres enseñan a las niñas las pautas básicas de supervivencia, y a los niños les enseñan a que sus necesidades serán atendidas siempre, primero por su madre y luego por su esposa. El resultado de esto es que muchos hombres carecen de la autonomía necesaria para vivir solos.
Las mujeres han sido tradicionalmente educadas para ser buenas esposas, y para educar pequeños reyes absolutistas y lindas criadas que a su vez eduquen a nuevas generaciones.
Además, igual que los  hombres abusan de sus privilegios de género, las mujeres también lo hacemos cuando echamos mano de estrategias pueriles o victimistas para conseguir lo que queremos.
Tendemos a infantilizarnos, a hacernos más vulnerables o desprotegidas, a emplear estrategias de guerra sucia para lograr nuestros objetivos. Interiorizamos el patriarcado, asumimos nuestra inferioridad, admiramos los valores masculinos, y renegamos de nuestra condición femenina cuando nos relacionamos con otras mujeres, porque nos han enseñado que las demás son nuestras enemigas. Así, en lugar de unirnos para luchar por nuestros derechos, permanecemos divididas, y a menudo solas, como la mayor parte de las protagonistas de las películas románticas. Solas somos más vulnerables, por eso es importante que tejamos redes de solidaridad y ayuda mutua entre mujeres.
6-  ¿Es necesario el feminismo?.
El feminismo es más necesario que nunca porque son millones las mujeres que sufren violencias y abusos de todo tipo. El día que las mujeres dejen de sufrir la ablación de sus genitales, la trata de esclavas sexuales, la violencia de género, las lapidaciones públicas, la miseria y la precariedad, el infanticidio femenino, entonces quizás podremos decir que el feminismo no es necesario.
Mientras tanto, las mujeres y los hombres tenemos que seguir luchando unidos para poder garantizar el acceso de todas las mujeres del mundo a sus derechos humanos fundamentales. Y no podremos parar hasta que haya una igualdad plena y completa, y hasta que las mujeres dejen de morir a diario a manos de sus asesinos.
El feminismo es tan necesario como otros movimientos sociales, del mismo modo que el ecologismo o el pacifismo. Ahora los feminismos están ampliando sus fronteras porque es necesario que los derechos de los que gozan las mujeres blancas de clase media en unos pocos países del mundo puedan extenderse a las mujeres transexuales, las mujeres afrodescendientes, las mujeres indígenas, las mujeres lesbianas, las mujeres pobres, las trabajadoras sexuales… en todo el mundo.
7-  ¿Cómo ves el tema de la violencia doméstica en América Latina?.  Algunas sentencias en Uruguay están hablando o introduciendo el termino feminicidio, pero aún en la mayoría de los casos se sigue usando el término homicidio.
Los jueces y las juezas de América Latina no pueden seguir ignorando este genocidio de mujeres. En México y Centroamérica está ya casi en los niveles del exterminio, es una verdadera tragedia humanitaria. Todos los días desaparecen mujeres o son asesinadas, y lo más terrible es que las defensoras de los derechos humanos también son asesinadas. Es un problema social gravísimo a nivel global, no sólo acá. Parece mentira que la gente se emocione más con el fútbol que con estas tragedias humanas que se producen a diario.
8-  Este año en Uruguay se aprobó la ley de matrimonio igualitario. ¿Cómo ves el proceso de incorporación de este tema en las agendas de los países latinoamericanos?.
Creo que en general se está avanzando mucho, cada día llegan buenas noticias en torno a este tema. Creo que es un gran paso pero los países no pueden limitarse sólo a aprobar la legalidad de la unión mientras sus políticos lanzan todo tipo de comentarios homófobos y machistas.
Para eliminar las fobias sociales que nos dividen, hay que trabajar no sólo los aspectos legales, sino también los culturales y emocionales. La homofobia y la transfobia matan, y hay que combatirlas con educación y cambios culturales, para que la gente aprecie las diferencias como parte de la diversidad.
Queda mucho por hacer, sin embargo. La gente que ama en clandestinidad está destinada al sufrimiento y hay que parar las olas de homofobia. El caso de Rusia, por ejemplo, es tremendo:  el Estado legitima la discriminación y la violencia contra gays, lesbianas, transexuales y fabrica odios para que la rabia y la frustración de las mayorías se dirijan contra las minorías más excluidas.
Es un mecanismo muy efectivo para distraer a la población de los problemas que realmente le afectan, y para canalizar toda la frustración de la gente para que se mantenga ocupada odiando a los homosexuales y no a los grupos de poder que empeoran nuestras condiciones de vida y de trabajo día a día. Creo que la comunidad internacional debería presionar más a este país y a otros en los que se mata a la gente por su orientación sexual o por su condición de género.
9-  ¿Cómo ves a tu España natal ahora que no vivís allí?
Lo que veo desde Costa Rica es que en mi país las cifras para sanidad o educación se van reduciendo cada vez más, pero las cifras de robo por parte de los políticos y sus familiares son exorbitantes. También impacta mucho el contraste entre las jubilaciones indecentes de los banqueros, y la cifra de gente que se suicida cuando se queda sin trabajo y sin casa. La reducción del presupuesto para cultura y educación contrasta mucho también con el aumento del presupuesto para armamento o para las Olimpiadas. El contraste entre las cifras de los recortes y las cifras del dinero que circula en sobres es demencial. No es sólo un tema de corrupción, sino de verdadero atraco a la población: se está produciendo un verdadero expolio de los bienes comunes que tanto nos costó construir. El imperio de la Iglesia Católica es tan excesivo, y su política ultraconservadora tan descarada, que atenta casi impunemente contra los derechos humanos fundamentales. Las más perjudicadas somos nosotras: nos han quitado el derecho al aborto y nos quieren en casa encerradas, para que no aumentemos las cifras de desempleados y exiliados económicos. La homofobia en España además es estatal: su objetivo durante años ha sido eliminar el matrimonio igualitario, aunque de momento parece que no pueden. Muchos de los avances en materia de igualdad se han venido abajo, y a quien más afectan los recortes de derechos y libertades es a las mujeres, en concreto,  las ancianas, que son las más perjudicadas por los atentados continuos a las pensiones y al sistema de salud pública.
La gente ya está pasando hambre. Sigo sin explicarme cómo no hay un estallido social que fuerce al gobierno a dimitir, pero también entiendo que los niveles de represión están aumentando de una forma brutal, en forma de multas, penas de cárcel y agresiones brutales. Resulta muy estremecedor que los responsables de la crisis y los corruptos están libres, y en cambio los activistas por los derechos humanos estén siendo castigados.
Lo único positivo que le veo a España es la gente que lucha por sobrevivir y que trabaja en colectivos para defender sus derechos y compartir recursos. Yo sigo mucho a esas mareas de colores que inundan las calles de gente protestando, y leo sobre las iniciativas locales para tejer redes feministas, espacios transgénero, espacios sociales liberados, cooperativas, huertos urbanos, bancos de tiempo, asambleas vecinales y redes de ayuda mutua. Muchos están aprovechando estas oportunidades para dejar de quejarnos encerrados en casa y buscar soluciones colectivas, y eso alivia la angustia.  De algún modo, saber que no estás solo o sola te hace sentir acompañado, te motiva, te estimula a trabajar por lo común. Tenemos que darnos cuenta todos de que sólo unidos podemos mejorar y cambiar las cosas.

Entrevista en Italiano: Gli amori Queer di Coral Herrera Gòmez